A pocos días de su Arribo a Córdoba el 29 de Septiembre en Quality Espacio, David Lebón lanzó el segundo volumen de su Lebón y Co. Al igual que la primera parte, el disco cuenta con la presencia de grandes invitados entre los que se destacan Charly García, Juanes, Skay Belinson, Sandra Mianovich, Abel Pintos, Conociendo Rusia entre otros.
El disco fue publicado el pasado 16 de Septiembre cuenta con 14 canciones. Algunos de los tracks presentes en el nuevo materia ya habían sido publicados con anterioridad como Tiempo sin sueño creando un cruce de «rusos» con Mateo Sujatovich; Esperando nacer, junto a Vicentico; En la vereda del sol, junto a Fabiana Cantilo, y Es Tren, con Skay Belinson.
Tema x tema
Intro: El disco empieza con una introducción de 49 segundos donde se escucha unas voces haciendo una especie de coro. Una introducción para las 13 canciones que vendrán, al estilo Pescado 2.
Ese Tren: La primera sorpresa del disco es la participación de Skay Bellinson. La presencia del histórico guitarrista de los redondos brinda una nueva reversión con una fuerte presencia de las guitarras (como era de esperar), lo que le da una frescura diferente a la versión original grabada por Serú Girán en su regreso de 1992. Celebramos la idea de reversionar Ese Tren, a juicio del escriba, una de las canciones más lindas de Serú, pero no de las más conocidas.
Creo que me suelto: Juanes es el encargado de acompañar al Ruso brindando una versión muy al estilo de lo que el músico colombiano viene haciendo en otras participaciones y en sus propios discos. Llevar el regustro al estilo más rocker de Juanes es una acertada decisión. Tiene algunos destellos de guitarras y pianos a destacar. Recordemos que el músico de Medellín viene de sacar origen un disco homenaje sus influencias entre los que se destacan varias canciones del rock como El amor después del amor de Fito Paéz y Dancing in the dark de Metallica, que lo llevo a ser elogiado por James Hetfield, vocalista de la banda de San Francisco.
Mi despedida: Llega el momento de encontrarnos con el Ruso baladista, con el hacedor de canciones de amor. Una versión que bien podría de ser de fogón, a diferencia de la versión grabada originalmente en Yo lo soñé (2002). La nueva versión tiene 5 segundos de guitarra acústica acompañada de un piano que nos mete en un clima de balada que seguirá hasta el final pero con la presencia de otros instrumentos y algunos pasajes donde se destacan los solos de guitarra eléctrica a la que nos tiene acostumbrados el ex Serú. Por otro lado, el piano logra una fuerte presencia acompañando toda la canción creando una nueva atmosfera a destacar. El invitado en esta versión es Antonio Carmona, prestigioso músico español de flamenco fusión.
El tigre y el león: Otra de las canciones románticas, esta vez con registro original en el disco Deja Vu (2009). Una de las canciones más parecidas a la versión original, aunque sin duda lo que la transforma en algo distinta es la aparición de Abel Pintos con una interpretación sin mucha sobresalto pero como siempre sublime.
Copado sobre el diablo: Llega el momento del blues con Sandra Mianovich como invitada. Creemos que es una de las versiones más logradas, el ritmo acelerado de la canción le da una frescura interesante mientras la cantante hace una interpretación bien blusera que es de destacar.
El tiempo sin Sueño: Reunión de «rusos» de distintas generaciones. No hay muchos apodos compartidos en la historia del rock argentina, por cierto. Por un lado, David, por el otro «el rusito» Mateo Sujatovich, cantante de Conociendo Rusia. La nueva versión de la canción grabada originalmente en El tiempo es veloz (1982). Por el registro original y el perfil melódico, la canción bien podría tomarse como un homenaje al propio Lebón. Una especie de reconocimiento a la trayectoria por parte de unas de las figuras de la nueva generación como es Sujatovich. La canción fue publicada como adelanto en el 2021.
Tema de Nayla: El ex Serú Giran se une a su hija Nayla para interpretar una de las canciones más emocionantes del disco, creada tras un hecho casi trágico ocurrida cuando la más pequeña era apenas una beba. La canción también cuenta con la participación de Hugo Fattoruso, uno de los músicos más destacados de Latinoamérica. La presencia del de Fatto en teclado en los últimos minutos es puro deleite.
En la vereda del sol: Otra vez aparece una retrospectiva a la etapa Serú Girán. Si bien se trata de una versión muy parecida a la original, suena más actual y la inclusión de Fabiana Cantilo como coequiper en la interpretación es realmente una delicia. Otra vez, la cantante demuestra que tiene con qué adueñarse de clásicos para hacerlos propios como ya lo hizo con su exitoso disco titulado precisamente con el nombre de esta canción, donde homenajeó a grandes músicos del rock.
Seminare: Si había un clásico que faltó versionar en el primer volumen era Seminare. La nueva versión tiene a Diego Torres. Salvo algunos retoques no es una versión que sorprenda demasiado.
Esperando Nacer: Un versión lograda con creces, incluso respetando bastante la original que grabó Serú e interpretó el propio David. A juicio de quien escribe, la elección de Vicentico, en este tema, con su particular forma de cantar y voz, transforman la canción en una de las destacdas del disco.
Cuánto tiempo más llevará: Al igual que las anteriores, la canción respeta bastante la original, salvo algunos pasajes donde se destacan los tradicionales solos de guitarra del David. La presencia de Rosario Ortega y Kevin Johansen la transforman en una versión distintiva por sus particulares formas interpretativas. A partir del minuto dos hay una transformación de la canción haciendo un juego de las tres voces, que sin descollar le da un toque bastante interesante al producto final.
San Francisco y el Lobo: Otro infaltable en el repertorio de David en Serú Giran. En este caso la presencia de Soledad Pastorutti le da un giro interesante gracias a la interpretación de cantante. Por momentos Soledad pareciera que se pone en la piel de una cantante con tintes de blues. Y eso no deja de ser una novedad para celebrar.
Nos veremos otra vez: Si había un músico infaltable en este disco y en la historia de David era Charly Garcia. Más teniendo en cuenta que había invitado en el primer volumen a Pedro Aznar. La nueva interpretación tiene a la voz de Lebón siempre por delante. Mientras que Charly hace su aparición haciendo coros o segunda voz pero sin grandes intervenciones como voz principal. Así era el esquema de la versión original, aunque con respecto al resto de los invitados, la presencia de García es más bien simbólica. Sin duda lo que vale es la historia que los une y que no sabemos si David sería lo que es sin Charly y viceversa. Es innegable que el paso de Serú en la historia musical argentina como en la de Pedro, Charly, Moro y Lebón es muy fuerte y, en algún punto, marco lo que hoy son.
Foto de Portada: José Cicala