Neil Young y Crazy Horse: El Poderoso Regreso con ‘Fu##in’ Up

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Grabado en vivo en 2023, Fu##in’ Up encuentra a Neil Young y compañía. Interpretando su clásico álbum de 1990 Ragged Glory casi en su totalidad. Cuando se lanzó por primera vez, ese álbum sentenció a Young como uno de los padrinos del grunge.

Está reinterpretación ruidosa y distorsionada está lejos de querer cuestionar el mote de padrino. Las canciones han sido retituladas, presumiblemente para aclarar el hecho de que las canciones antiguas pueden reexistir con otra ropa, aunque siguen siendo las mismas.

Quienes hayan visto o sigan la historia de Young y los Crazy horse, saben que nunca interpretan sus canciones de la misma manera en cada show, y Fu##in’ Up ejemplifica ese espíritu espontáneo y de constante exploración.

Quizás este álbum junto a Never Sleeps (1979) y Live Rust (1979) se pueda oírlos como una declaración artística. Es que seguramente estos álbumes estén dentro de los que lograron cerrar la brecha entre el folk americano que Young había innovado y el entonces emergente punk rock. Siempre en sintonía con el momento presente, ya sea en su política o en sus debates en la industria musical (léase: Spotify), Young nunca ha caído en la nostalgia, y mucho menos en la irrelevancia.

Dicho todo lo anterior, Fu##in’ Up se puede oír como un viaje al pasado. Este nuevo lanzamiento consta de sólo nueve canciones pero dura alrededor de 64 minutos, el álbum es esencialmente un homenaje pista por pista a Ragged Glory (1990), al apasionante sexto álbum de Neil Young y Crazy Horse. La única canción que falta en el disco original es “Mother Earth (Natural Anthem).

Grabado en noviembre de 2023, en un show privado en el Rivoli de Toronto, Fu##in’ Up destaca a Neil Young y Crazy Horse en su mejor momento: suelto, ruidoso, pero sin ser prolijo. Por razones que no están claras, todas las pistas han sido renombradas con letras de las canciones. Crazy Horse también ha sido revisado, está vez lo intengran: Micah Nelson, el hijo de Willie Nelson, y Nils Lofgren se unen a Billy Talbot (bajo), Ralph Molina (batería) y Young en este disco.

Es difícil decir qué temas se destacan en Fu##in’ Up.  Los más fuertes de Ragged Glory, como el tema “White Line” –rebautizado como “Feels Like a Railroad” en este LP – y el romanticismo del garage rock de “Over and Over” –rebautizado como “Broken Circle” – brillan igual que en el disco original. El tercer tema, “Heart of Steel”, es una repetición de “Fuckin’ Up” de Ragged Glory.

Otras joyas incluye esté álbum son “Valley of Hearts”  (originalmente llamada “Love to Burn”) de 13 minutos y un igualmente discursivo “Chance on Love” (“Love and Only Love”) de 15 minutos.

La pregunta que muchos deben hacer es, ¿Por qué volver a esté albúm hoy?.  Tal vez sea por una tradición americana, muchos músicos han consistido en encontrar un camino a través del presente recurriendo al pasado. Bod Dylan recurrió a los estados unidos del siglo IXX en su álbum John Wesley Harding (1967) para afrontar la escalada de violencia en Vietnam. Por su lado Bruce Springsteen buscó explorar la era post-Vietnam en Nebraska (1982) a través de baladas que parecían historias extraídas de periódicos antiguos sobre pequeñas ciudades de Estados Unidos.

Tal vez la resistencia de Ragged Glory tenga que ver con su compromiso con un tema atemporal: el amor, ya sea por el hogar, una persona o las líneas blancas de la carretera. El título Ragged Glory no se refiere a la bandera estadounidense como se suele suponer, sino al espíritu del amor.

En Fu##in’ Up, Neil Young y Crazy Horse encarnan lo que realmente significa envejecer. Se mueven un poco más lento pero suenan mucho más irritables. Son alegremente indiferentes a las formalidades, como tocar el coro de “City Life (Country Home)” en el momento adecuado, porque ya no les importa impresionar a nadie

En conclusión, Fu##in’ Up es parte de un momento transcurrido en una hermética fiesta Vip para uno de los hombres más ricos de Canadá celebrada en un popular barrio bar en el centro de Toronto, aunque al escuchar su sonido podría pensarse que Neil está encerrado junto a sus compañeros en un viejo granero de Estados Unidos jugando hacer música.