De la gira internacional al pogo en Córdoba: el viaje musical de Marina Fages

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Marina Fages sigue expandiendo su universo musical, fusionando el punk, el folk y la experimentación sonora en un camino que la ha llevado por escenarios de Europa y Estados Unidos. Con su nuevo vinilo, Mi Corazón en Llamas, la artista no solo revisita su discografía, sino que incorpora colaboraciones que reflejan su conexión con la escena emergente. El 21 de junio estará en Córdoba, en Pez Volcán, presentando este material en un show que promete intensidad y emoción. En esta entrevista, habla sobre sus experiencias en la gira internacional, la producción de su próximo disco y su amor por el hardcore punk, un sonido que vuelve con fuerza a su proyecto

Otra Canción: Se vienen fechas importantes en el interior como Rosario y Córdoba. ¿Cómo te venís preparando para estos shows?

Marina Fages: Son los últimos conciertos de esta primera etapa del año. Estamos presentando el vinilo Mi Corazón en Llamas, un compilado con canciones de mis últimos tres discos. Se editó hace un mes en Estados Unidos bajo el sello Siteke Records, y lo mostramos allá y ahora en Argentina. Ya tocamos en Mar del Plata y Pinamar, y ahora seguimos con estas fechas. Luego vamos a tomarnos dos meses para empezar a grabar el nuevo disco, pero en septiembre retomamos la gira.

O.C.: Venís de girar por Europa y Estados Unidos, donde además grabaste para un sello. ¿Cómo fue la experiencia?

M.F.: Estar de gira tiene cosas muy buenas y también desafíos. Es un ritmo intenso, con muchos shows seguidos y pocos días de descanso, pero es increíble tocar en distintos lugares, llevar nuestra música y conocer nuevos escenarios. Lo disfruto mucho porque expande los horizontes, te da experiencias únicas… ¡y también la oportunidad de probar comida nueva!

O.C.: Pensando en el sello estadounidense que editó tu vinilo, ¿fue solo por esta edición o también hay interés en tu próximo disco? ¿Van a seguir trabajando juntos?

M.F.: Vamos a ver… Calculo que sí, pero mejor hablemos de eso cuando el próximo disco esté listo.

O.C.: Pero hubo interés, ¿verdad? ¿O solo les gustó la idea de un compilado?

M.F.: En realidad querían lanzar un disco nuevo, pero todavía no estaba terminado.

O.C.: Mi Corazón en Llamas es un título muy potente. ¿Cómo surgió? ¿Tiene alguna relación con el contexto actual del país o con un momento personal?

M.F.: En mi disco anterior, El Mundo Pequeño, hay una canción llamada Mi Casa en Llamas. Quería un nombre que englobara todas esas canciones y que además funcionara como título de la gira. Para mí, hacer música es como prenderme fuego: es lo que me mantiene en movimiento, lo que me impulsa a seguir y a buscar personas que lo sientan igual para armar equipo. Ahora somos una banda, y sé que todas compartimos esa forma de vivir la música.

O.C.: El mundo pequeño salió en 2023. Ya pasaron casi dos años… ¿Cómo lo ves ahora? ¿Sigue resonando en vos o crees que tu búsqueda artística cambió?

M.F.: ¡Solo pasaron dos años! Claro que lo veo actual.

O.C.: Sí, pero en dos años pueden pasar tantas cosas que quizás sentís que ya pertenece más al pasado…

M.F.: Bueno, la composición de esas canciones viene de mucho antes. A mí un disco me lleva aproximadamente tres años de trabajo. Hoy estoy componiendo nuevas canciones, pero siguen en sintonía con lo anterior. Me sigue gustando mucho lo que hice y lo disfrutamos en vivo. De hecho, en los shows quedaron más las canciones enérgicas, porque estamos haciendo un recital con pogo, con mucha emoción y con mucho grito.

Otra Canción: Hablando de ese pogo, esa energía… Varios músicos me dijeron que sienten que es el momento de salir, gritar, hacer ruido, encontrarse. ¿Creés que hay una conexión entre la música y lo social o político?

Marina Fages: Son ámbitos distintos. Una cosa es salir a hacer quilombo en una plaza y otra es un recital en un lugar cerrado, donde nadie te va a tirar gas por expresarte. Pagar una entrada para ir a desahogarte es súper necesario, pero es diferente a poner el cuerpo en una movilización. Son experiencias distintas, ¿vos qué pensás?

O.C.: Es cierto que son experiencias diferentes, pero al mismo tiempo, un recital también puede ser una trinchera: puede hacerte pensar, dejar un mensaje…

M.F.: Depende del mensaje que haya en las canciones. Hay de todo. Para mí, estar en el pogo de un recital es distinto a estar en una plaza protestando.

O.C.: ¿Pero creés que se puede militar desde un escenario, desde una canción?

M.F.: Puede ser. Si la composición viene desde ese lado, sí. Las letras son clave para eso. Igual, creo que es más una discusión filosófica: ¿qué hace que el mundo sea mejor? ¿Ir a una movilización? ¿Juntarte con tus amigos a pasarla bien? Para mí, todo eso ayuda. También estar presente en tu barrio y en tu comunidad, ver qué pasa en tu cuadra y en tu familia.

Me gusta el mensaje político y la cosa contestataria, pero muchas veces siento que históricamente las bandas se quedan solo en el escenario haciendo eso, y no hay una red. Pero si eso igual ayuda a que otra gente piense cosas, ya es un aporte.

O.C.: Pienso en Mi Corazón en Llamas, y en la canción Hardcore Disney, donde invitás a Homogénica y Lagrimitas. ¿Cómo surgieron esas colaboraciones? Son bandas que no conocía.

M.F.: Son bastante nuevas. Las conocí en febrero, en el Fiera Festival, donde una de las organizadoras es Lola, la cantante de Homogénica. Compartimos escenario y quedamos flasheadas con las chicas. Fue como: «Che, estas bandas están buenísimas, son propuestas muy distintas, muy nuevas, pibas que la están poniendo toda.»

Ahí empezamos a hablar, y cuando surgió la idea del compilado, no queríamos que fuera solo un rejunte de canciones viejas, sino que algunas fueran reversiones.

Otra Canción: En Mi Corazón en Llamas hay tres temas especiales: Helicópteros, con Cosmic Kitten; Hardcore Disney, con Lagrimitas y Homogénica; y una versión de Piedra María Fuego, más rockera. ¿Cómo surgieron estas colaboraciones?

Marina Fages: Quedé re flasheada con Lola como gestora. La idea de hacer Hardcore Disney surgió después de compartir escenario en el Fiera Festival en febrero. Nos sorprendieron las propuestas de Lagrimitas y Homogénica, bandas muy nuevas pero con muchísima potencia. No queríamos que el compilado fuera solo un rejunte de canciones viejas, así que algunas son reversiones. Grabamos Hardcore Disney en tiempo récord, y hasta hicimos un video que todavía no salió. Lola ahora está trabajando con nosotras en la producción de estos shows.

O.C.: En Helicópteros invitás a Cosmic Kitten. ¿Fue idea del sello?

M.F.: Sí, fue una propuesta del sello. Escuché su música y me encantó, así que grabamos a distancia: ellos me mandaron las voces desde allá. Es hermoso cuando las cosas se dan naturalmente. Luego compartimos dos fechas en Long Beach y San Francisco, y la banda es increíble. Con Karen, la cantante, sentí una afinidad muy zarpada.

O.C.: ¿Te dieron ganas de colaborar con más bandas de afuera?

M.F.: Conocí bandas muy copadas tanto en Europa como en Estados Unidos. Ojalá eso se traduzca en colaboraciones. Lo que tengo muchas ganas de hacer, pero todavía no tuve tiempo, es una playlist con música de todas esas bandas. Me gustaría armar algo con los temas que más me gustaron de cada una. Conocí proyectos muy piolas.

O.C.: El arte de tapa está hecho por vos. Mi Corazón en Llamas evoca un bosque en llamas, y parece tener múltiples interpretaciones. ¿Cómo surgió? ¿Lo pensaste para el disco?

M.F.: En realidad elegí un motivo que ya trabajo en mis murales. Los bosques son una de las imágenes que más uso cuando pinto, y necesitaba una imagen que representara los tres discos en conjunto. Sentí que ese cuadro cerraba bien, que tenía que ver con mi imaginario.

Los invito a ver más de mi arte visual en Instagram, en Marina Fages Pintura. Ahí se van a conectar mejor con todo esto.

Otra Canción: En varios discos tenés invitados… ¿Cómo elegís las colaboraciones?

Marina Fages: Me interesa que las colaboraciones sean orgánicas, que tengan un sentido. En general, cuando invito a alguien es porque siento que esa canción estaría muy bien con esa participación, no solo con quienes cantan, sino también con quienes tocan.

O.C.: Me decías que pronto vas a entrar a grabar el nuevo disco. ¿Ya tenés algunas canciones armadas?

M.F.: Sí, el disco nuevo ya está completamente compuesto. Ahora toca entrar a grabar, aunque primero hacemos maquetas—ya empecé un poco con eso. Luego lo empezamos a trabajar con Martina Boxsider, mi baterista. Vamos a producirlo juntas.

O.C.: ¿El sonido va por un lado más rockero, parecido a El Mundo Pequeño, o será más tranquilo?

M.F.: Sigue en la línea del hardcore punk.

O.C.: Es un movimiento que está recuperando espacio, hay una movida que vuelve a crecer

M.F.: Sí, claro que está recuperando fuerza. Está de moda, por fin, volvió el aguante. Si mirás un poco atrás de Madera Metal, está el disco El Tronador, un grupo en el que componía, donde las canciones eran folk punk. Yo vengo de esa escena.

Cuando empecé a ir a recitales eran de punk, de hardcore. Me recabe esa energía. En ese momento agarré una guitarra criolla y empecé a hacer otro tipo de cosas cuando empecé a tocar afuera, pero me siento completamente alineada con esa sintonía. Me alegra muchísimo que ahora esté de moda.

O.C.: Para cerrar, ¿qué nos podés adelantar del show del 21 de junio?

M.F.: Que vengan a cantar, a apoyar. La vamos a pasar muy bien, porque juntarnos a cantar y a llorar también es una forma de hacer un mundo mejor.