Termina un año particular. Otra Canción destaca 16 discos que nos dejaron cosas para seguir conversando. Y una yapa.
* Músico – Juan Ingaramo
“Músico” aparece como una especie de auto validación, no por necesaria sino por tributaria ante lo noble y tradicional del oficio» decía Juan Ingaramo a Otra Canción cuando las canciones que conformaban su nuevo disco eran aún una incógnita. En esa conversación, Juan presentaba a su nuevo disco como «el hermano mayor de Pop Nacional«. Por un lado, la continuidad en esa exploración musical que él define como hija «de mamá canción y de papá Argentina«. Por otro, el crecimiento que eso implica a partir de una mayor cantidad de recursos y sonidos aprehendidos y puestos a disposición de su obra. En ese sentido, «Músico» no escatima en incursionar en los colores más actuales del pop mundial y de una música urbana que todavía no termina de explotar en el masivo nacional, aunque tenga algunos exponentes fácilmente identificables. Como todo lo que crece, las marcas de lo vivido siempre quedan y se ponen de manifiesto de modo constante. En «Músico» aparecen las huellas de los protagonistas que el artista ubica en la cima de la proyección genética de su propia obra. Ingaramo vuelve a ponerse a disposición del pop nacional con un par de piezas que retoman el pulso cancionero que construyen los diálogos musicales que se disparan desde su voz y su teclado para desembocar en un sorpresivo cierre jazzero en el que parece volver todo al punto cero del sonido marca Ingaramo. Para volver a partir. Para renacer en la siguiente escucha que empieza a hacer visibles las razones y pensar en la próxima escala de la evolución de la familia discográfica que va gestando la obra Juan Ingaramo.
Obligadas para el playlist: «Soltar«; «Matemática«; «Mi chica«.
* Amuchado – José Luis Aguirre
El transerrano José Luis Aguirre revalida todas las expectativas que sobrevuelan su obra ante cada nuevo movimiento. En la vípsera de la nochebuena, las canciones de «Amuchado» comenzaron a girar para instalarse rápidamente en un universo de escucha que lo recibió con los brazos abiertos. Algunas de las canciones ya venían teniendo su anticipo en la presentaciones habituales de José Luis que fueron allanando el terreno para un disco que vuelve a portar el puñado de características que convierten a su obra en una de las más importantes de la música de raíz que se renueva de modo constante. La poesía es tan extensa como profunda, el testimonio y la introspección conviven casi como la praxis cotidiana del encuentro con la razón de existencia. Un filosofar mundano que sirve, como cada canción de Aguirre, como testimonio de época y como himno de proyección de acceso universal. Musicalmente, el abrazo que amucha expresiones populares va andando en las quince canciones por la que circulan paisajes, luchas populares, personajes públicos, ignotos héroes anónimos y el manifiesto del trovador reflexivo. Este sea, quizás también, el disco de José Luis Aguirre en donde esas características se conjugan con una interpretación que alcanza puntos muy altos entre fraseos en clave de proclama y susurros en forma de canción. Un imprescindible para comprender los horizontes de la música de proyección folclórica en esta segunda parte de la década del 10.
Obligadas para el playlist: «Teletransportador«; «Tranquilo pero con fiesta«; «Los Chuncanitos del Río«.
* Transformación – Palo Pandolfo
Palo lo hizo otra vez. Volvió a reinventarse usándose a sí mismo como referencia para proyectarse hacia un nuevo estadio de su obra. Con las cartas sobre la mesa es fácil recibir las canciones de «Transformación» como la consecución lógica de «Esto es un abrazo», el primer disco con La Hermandad. Pero con Pandolfo es difícil imaginar cosas en la previa. También es necesario señalar que la lógica productiva podría haberlo dejado parado en el mismo sitio que tan buenos resultados le había dado años atrás. El salto, otra vez, es para adelante. Palo retoma el camino que fácilmente podemos linkear con sus primeras épocas de consagración con Don Cornelio pero que a la vez se enmarca en el intento estar parado en el presente continuo de la música nacional. Rock Pandolfo. Guitarras al frente, pulso firme y una prosa particular que podríamos definir como de «arrabal ilustrado». Tan tanguero como como filosófico, tan Palo Pandolfo como siempre. Un faro que gira y va iluminando todo a su alrededor.
Obligadas para el playlist: «Morel«; «Un reflejo«; «Drácula«.
* La Humanidad o Nosotros – IKV
De los discos que se nombran a partir de una declaración de principios. La banda liderada por Dante Spinetta y Emmanuel Horvilleur vuelven a las raíces que los llevaron a ser referencia obligada en la música de proyección en nuestro país. Después de una acertada vuelta al ruedo con «Chances», los IKV que ellos definen desde un plano espiritual más avanzado. Musicalmente, se vuelven a profundizar los lazos con los ritmos que cruzan el continente de norte a sur. Al combo rock-funk-pop-soul-rap-hiphop se suman en «L.H.O.N» un conjunto de colores propios de latinoamérica profunda y revisados tantas veces por los artistas más referenciados del continente, con los que los IKV parecen tener un diálogo que no habían experimentado en su primera etapa que había culminado con el siglo pasado.
Obligadas para el playlist: «Gallo negro«; «Ritmo mezcal«; «Ey Dios«.
* Fly Fly Caroline – Fly Fly Caroline
Probablemente, uno de los discos más esperados de los últimos tiempos en Córdoba. La banda que comanda Carolina Merlos era una de las tantas que, a lo largo de la historia, comienzan por tejer una red de escuchas y seguidores desde los escenarios mientras hacen esperar a la edición del material grabado. En otros tiempos, los fenómenos podían responder a cuestiones de índole económica, de producción, de posibilidades concretas de ejecución. Hoy, hablamos de una decisión artística y tiene que ver, centralmente, con la búsqueda propia de cada agrupación. Los tiempos que Fly Fly Caroline decidió aprovechar para pulir su perfil estético tuvo un resultado gloriosos que se comprueba en su opera prima. El trabajo se caracteriza por una apuesta a la canción pop diferente a la que reina en la actualidad. Hay más densidad, matices de nocturnidades contundentes que acompañan el sonido que eleva al escucha a una pista de baile eterna. Todo es ejecutado con una minuciosidad extrema que dan como resultado el abrazo instrumental a la voz de Merlo que se confirma como una de las más originales en la escena cordobesa de la actualidad.
Obligadas para el playlist: «Mirada infinita«; «Espirales«; «Celebración»
* En vivo en Red House – Manal
El último elegido es una especie de bonus track. En el 2016, se cumplieron 50 de lo que muchos consideran la primera grabación de la historia del rock argentino. Los homenajes, los revivals, las reediciones, las reuniones, se replicaron por todos lados. Entre todas esas situaciones, la edición del disco en vivo, el DVD y el libro de la sorpresiva reunión de Manal en 2014 sea lo más destacado. Por la improbabilidad precedente y por lo maravillosos del testimonio. Un registro que inmortaliza un encuentro que llama la atención por lo sólido del sonido, por la profundidad conceptual y el diálogo intacto entre tres personalidades demasiado fuertes que desde hace cuarenta años parecían más recordadas por sus diferencias que por sus lazos cercanos. Manal es, además, a cincuenta años del nacimiento del movimiento del rock autóctono la única formación de la primera época cuyos integrantes están vivos. Un dato más, que alimenta el mito.
Obligadas para el playlist: «Avellaneda Blues«; «Jugo de tomate«.