Juan Arabel presenta «Un ínfimo hilo de luz»

El músico riojano presenta el jueves 18 de Agosto su segundo trabajo discográfico en el auditorio de la facultad de Lenguas.

«Un ínfimo hilo de luz» es el nuevo trabajo de Juan Arabel, el músico riojano que desde hace  varios años se radica en Córdoba. El nuevo trabajo esta compuesto por nueve composiciones propias en las que conviven diferentes géneros, siempre sostenido por una base folclórica y una fuerte  impronta riojana en sus letras, sobre todo en el ruido de la cajas y en esas chayas que hablan de la amistad, el lugar de nacimiento o el barrio donde se crío. Todas estas temáticas, muy arraigadas al cancionero popular de La Rioja.  Se trata de un trabajo que cruza lo introspectivos y lo festivos donde la alegría del febrero riojano se hace presente al igual que ese desarraigo propio del cantor que deja su tierra en busca de horizontes nuevos. Juan no solo le canta a su tierra, esa que extraña y recuerda en cada canción, sino también al anhelo por un tiempo mejor, donde no existan los buitres del pan y la paz, que llegan para llevarse lo más preciado de los pueblo.

El disco da un nuevo aire al cancionero popular riojano, en el que conviven diferentes géneros musicales como el rock, el jazz, el valsecito peruano, siempre sostenido por una base folclórica. La convivencia se nota en canciones como  «Carnaval para los amigos», «Para renovar los días», «Era una flor» o «Dejo de Raíz». En «Un ínfimo hilo de luz», Juan está acompañado por Federico Lucero en guitarra, Luciano Maro en contrabajo, Amaro Ferraris en bateria. Tambien cuenta con grandes invitados entre los que se destacan Clara Presta (en acórdeon), Ramón Navarro (recitado), José «Josho» Tello (Caja Chayera y bombo), Memi Vieto (en coros) Lucas Millicay (accsesorios), Nick homes (saxo Soprano) entre otros.

Otra Canción-Pasaron 6 años desde la salida de «Semilla», tu primer trabajo discográfico y «Un Ínfimo Hilo de luz». ¿En qué momento te encontró este disco?
Juan Arabel: Después de cerrar el ciclo con el trío, allá por el 2012, comenzó a crecer cada vez más una necesidad por buscar en mi música cosas nuevas. Tantos años gestando mi primer trabajo me dejó en una posición en la cual había dejado de seducirme artísticamente. Buscaba sentirme nuevamente incómodo y encontré en los lenguajes más propios de la música urbana un condimento que hizo que eso nuevo que quería decir y expresar  pueda canalizarse de una manera más directa y actual. Encontré en Fede Lucero esa sustancia que andaba buscando, a la vez que a él le sucedió lo mismo con la música riojana y así comenzaron a gestarse los sonidos que hoy se vislumbran en este nuevo disco.

OC-  El disco lleva el nombre «Un Ínfimo Hilo de luz». Parece un grito de principios, una canción con una fuerte temática social. ¿En qué momento surge?
JA: Esta canción surge en un momento de efervescencia social muy fuerte en La Rioja. A fines del 2012 atravesábamos la cúspide de la lucha del pueblo del Famatina en contra de la megaminería contaminante, y ese fenómeno generó un despertar inmediato en la consciencia del pueblo riojano. Fue histórico que una ciudad relativamente chica convoque 30 mil personas en la plaza principal proclamando una voluntad popular, un mensaje muy claro que decía que el poder verdadero pertenece al pueblo. Todo eso produjo un proceso muy fuerte de reflexión sobre el rol de un artista en un determinado contexto histórico. Ahí es donde creo que aprendí una de las señales más fuertes que viven en los artistas referentes y que uno admira, que es la claridad en un mensaje plasmado de una forma directa y visceral, de acuerdo con el contexto social en el cual se convive. Y todo esto que te cuento surgió en medio de este proceso de búsqueda en cuanto a una decisión estética de cómo encarar una música que diga y exprese el tiempo actual en que vivimos. Es por eso que decidimos con Fede poner de nombre al disco el título de esta chaya, porque engloba en sí mismo todo un concepto que ronda en el total de las nueve canciones del proyecto, como un hilo conductor.

OC-Alguna vez alguien me dijo que la música folclórica argentina está perdiendo el compromiso social que en otros tiempos caracterizaban las letras, o por lo menos no son las que más se consumen o le dan prioridad en los festivales. ¿Vos que opinión tenes al respecto?
JA: Yo creo que no es así, lo que sucede es que gran parte de los nuevos decidores de este tiempo no son difundidos con la masividad que en otras épocas tuvieron un Leguizamón – Castilla, o un León Gieco por ir a otras aristas musicales. Hoy en día la cantidad y la calidad no son sinónimos para la industria musical. Importa mucho más lo primero que lo segundo. Obviamente que esto no sucede en absolutamente toda la música que se produce en el país o en latinoamerica pero si en la mayoría. Y sobre todo somos herederos y consecuencia de una década de los 90 en donde se desarrolló una sociedad de consumo terrible que repercutió demasiado en la música independiente y generó una distancia muy grande. Se trata de una concepción política, hoy en día hemos visto algunos pocos intentos de nivelar un poco con la difusión de la música independiente y eso está teniendo sus frutos de a poco. El ejemplo está en un José Luis Aguirre o un Ramiro González cantando la cosechera perdida en el festival de Cosquin. Eso ya te está hablando que hay una puja que viene de abajo y que va haciendo su lugar en una sociedad que culturalmente ha sido muy machacada y que hoy está cerrando de a poco sus cicatrices.

OC -Siento muchas influencias folclóricas en las letras pero también me imagino una nueva influencia musicalmente si lo comparamos con tu primer trabajo. ¿Qué te influenciaron en este nuevo disco?
JA: No me gusta hablar de influencias directas, Si es cierto que en este proyecto hemos abierto el juego a la recepción de conceptos y universos estéticos diferentes a las que venía manejando de una manera más resaltante. Pero esos conceptos son tan variados que es imposible catalogarlos o clasificarlos. Es por eso que prefiero hablar de una música argentina más universal, de acuerdo con una actualidad en la que vivimos más diversificada, híbrida y sincrética. Por supuesto que el acercamiento al jazz por medio de Fede o de la música académica gracias a mis estudios en la licenciatura en composición de la UNC ha tenido un peso importante en este proyecto. Pero más importante es la resultante de todo esto, y que esa resultante sea simplemente una música que invite a la reflexión y a ese conmover que siempre se busca desde una obra artística.

OC-En otro plano, hay momentos más introspectivos, reflexivos como cuando cantas  “Yo espero para renovar los días, pa’que los días sean menos tristes los inviernos, reencontrarme en la guitarra de la vida, es febrero cuando todo duele menos” en para renovar los días en la canción para renovar los días…
JA: Las canciones son reflejos directos del contexto en  donde fueron creadas. En mi caso muchas de ellas nacieron en épocas de carnavales o en momentos de nostalgia. Para el riojano febrero es un mes místico, donde uno se renueva y puede sentir ese cambio a flor de piel. Uno busca eso en los rituales chayeros, en la quema del pusyay o en la vidaleada donde podes sentir que sacas de adentro todo un bagaje de sentimientos y sensaciones que fuiste acumulando en el año. Febrero también es un fuerte generador de valores significantes de identidad en el pueblo riojano. Veo muy importante nombrar y decir las cosas que suceden en estas épocas, para que esa identidad también pueda encontrarse en una canción.

OC-“En el recelo del parche una nostalgia abrirá, el carnaval del amigo yo sé que al año volverá. Ya he de llegar ya he de volver, al barrio humilde que me vio nacer, al carnaval de mi querer en la Facundo volver a crecer”  dice la Carnaval del amigos. ¿La canción si no me equivoco lleva el nombre de la Chaya que se realiza en Facundo Quiroga y diría que es una declaración a tus amigos?
JA: Tal cual, es un homenaje a una de las primeras chayas barriales que resurgieron después de la nefasta década de los 90 y que arrasó en la juventud de ese tiempo cerrando puertas para encontrar en estas fiestas algo de que agarrarse y sentirse identificado con tu lugar. El carnaval de amigos nació como una idea de juntarse a festejar y a chayar para febrero y con los años se fue haciendo mas grande, hasta que en un momento se constituyó como la chaya barrial para los jóvenes, donde muchos vieron por primera vez rituales como el topamiento o la quema del pusyay. Eso me llena de orgullo y lo llevo como una bandera, más allá que después se haya tergiversado un poco el objetivo principal. Siempre voy y la siento totalmente mía, porque formo parte de la “comisión organizadora” entre mis amigos y me siento responsable por seguir dándole un sentido y que quienes vayan a compartir la hagan suya también.

OC–Del disco participa uno de los referentes máximos de la música popular riojana, Ramón Navarro además están Martín Molina Torres y el Negro Cortez. ¿Cómo surge la idea de invitarlos? ¿Cómo fue la elección de las canciones en las que participarían?
JA: Todos ellos son referentes para mí y son portadores de una bandera que lleva en si misma mucha riojanidad, cada uno desde su lado y desde la generación a la que pertenecen. Ramón como el mas “viejo” como cariñosamente le decimos, y Martín como parte de la nueva camada. Ellos están en Cantor vidalero, una canción con una impronta riojana muy fuerte, me sonó ideal para ellos. Y Ramón recita Un ínfimo hilo de luz porque en el se resume todo un rejunte de sensaciones que tienen que ver con la esperanza.

OC-Del disco también participan muchos músicos  invitados de distintos lugares como Clara Presta (en Acórdeón), Lucas Millica (Bombos y caja chayera) radicados en Córdoba. Mientras que también están Josho Tello (Caja Chayera), Nick Holmes (Saxo) radicados en La Rioja entre otros.  Me imagino que no debe haber sido fácil poder organizar un disco donde participan músicos radicados en diferentes lugares…
JA: Gracias a internet todo es más fácil. El disco se grabó en vivo con la mayor cantidad de amigos posibles y después hubo invitados que fueron aportando lo suyo desde sus estudios o desde su casa. Hoy en día es posible y se hace mucho más fácil y llevadero montar producciones de este tamaño.

OC-Este nuevo disco me atrevería a decir que tiene dos provincias responsables por un lado La Rioja en sus letras y por otro lado la parte mas jazzera supongo que lo aprendiste en Córdoba…
JA: Córdoba es una ciudad híbrida, por ser centro del país y tener la universidad más grande y abarcativa recibe muchos jóvenes de muchos lados, cada uno con su propia cultura y su propia manera de pensar. Eso te permite y te obliga a tener una apertura de cabeza y a convivir y dialogar con otras estéticas, ahí entra una música como el jazz.

OC- A lo largo de las nueve canciones que componen el disco, compartís la autoría de tres con Federico Lucero. ¿Cuánto tuvo que ver el con el sonido del disco, más teniendo en cuenta que es un músico por ahí más ligado al Jazz?
JA: Fede fue muy importante porque sobre todas las cosas dedicó una entrega inmensa al proyecto, no solo desde lo musical si no también desde lo humano, como amigo y colega. El disco nació bajo esa premisa instrumental. Guitarra eléctrica de media caja y guitarra criolla. Ahí radica todo el concepto sonoro que involucra a todo el proyetTo.

OC- Si bien el disco tiene gran influencia del jazz sin perder raíz folclórica hay un tema que se diferencia “Colibrí”, un valsecito peruano. ¿De dónde surge la idea de incursionar en este estilo?JA: Surgió una tarde luego de vivir una chaya en la cual había muchas bailarinas que danzaban en un patio de tierra. Esa imagen intentamos reflejarla contando la historia de un cantor que se enamora de una de esas bailarinas y cuando la ve imagina que es un colibrí, con un danzar ligero y casi por encima del suelo. Después la idea de lo rítmico fue surgiendo sin pensar mucho en el género. Cuando terminamos la canción nos dimos cuenta recién que la música habita un Perú arrastrado hacia los cerros riojanos. Esa sensación fue muy linda y por eso decidimos mantener esa frescura en el disco.

OC – Sé que suena tal vez apresurado pero teniendo en cuenta  la incursión en nuevos ritmos como el Jazz o el valsecito peruano. Que sin duda son parte de una búsqueda, de un crecimiento musical. ¿Podemos verte incursionando en otros géneros latinoamericanos? ¿Cuáles serían?
JA: Me encanta la música brasilera, la cumbia colombiana también. Son músicas nacidas en la calle, entre la gente. Eso me seduce enormemente porque contienen en ella la sustancia que permite que la gente de determinado lugar se sienta identificada con esa música. Veremos que nos depara, por ahora son solo músicas que admiro y que me gustaría conocer mas profundamente. Solo eso.

OC- En una época donde el disco como objeto físico según algunos cada vez se consume menos, donde las disquerías cierran,  hay una generación que si bien entiende la situación y suben el disco en Internet para descarga gratuita, también siguen apostando al físico. ¿Por qué se sigue apostando al disco físico sabiendo la situación?
JA: Porque es una manera de palpar con tus propias manos la obra. Es lo mismo que dialogar con alguien, compartir un mate o tomar un café. Si bien podes chatear o vivir de la mensajería instantánea no lo vas a comparar con la cotidianeidad del contacto humano. El disco como lo fue el vinilo en algún momento, e intenta serlo ahora, es la manera más humana de reproducir la música que hiciste. Mantiene una calidez que es imposible percibirla en los medios digitales.

OC- Si bien la presentación oficial será el 18 en la facultad de lengua, algunos ya hemos tenido la posibilidad de verte tocar algunos temas en diferentes shows. Donde había lugar para la improvisación por parte de los músicos. ¿Se dará también la posibilidad de la improvisación en está ocasión?
JA: La improvisación en el disco está concebida desde una perspectiva más amplia que un simple solo en algún momento determinado. La improvisación es un salto al vacío, es construir un mensaje en el momento. El disco muestra muchos momentos improvisados y otros más pautados estructuralmente. En la presentación se verán estas dos concepciones claramente

OC- Me imagino que tu cabeza debe andar a mil y debes estar pensando en presentarlo en otros lugares y porque no en algún otro proyecto. ¿Cómo sigue el año para Juan?
JA: Después de la presentación se viene una ópera que se estrenará en el Teatro San Martín y lleva por nombre Los alfareros de la sangre, después seguiremos presentando el disco tratando de llegar a todo el país, y porque no intentar llevarlo hacia afuera. No lo sé, siempre me propuse superar metas a corto plazo e ir viendo que te ofrece el panorama. Por ahora vamos con eso, después se verá que sigue.

Juan Arabel  presenta «Un ínfimo hilo de luz» el jueves 18 de Junio en el auditorio de la Facultad de Lenguas; 21:00hs