Mientras cada vez hay más pibes intentando imitar el éxito rápido -¿y efimero?- de Justin Bieber o One Direction, aparece un pibe de 19 años que a lo Dylan se cuelga la guitarra, compone y canta canciones folk rock.
Jake Bugg nació el 28 de febrero de 1994 en un pueblo llamado Clifton, en Nottingham, Inglaterra. Hace poco, a sus 12 años, en un capitulo de los Simpsons escuchó la canción Vincent de Don McLean y quedó impactado. A partir de ahí cambia la historia del niño. Consigue una guitarra e intenta imitar a esos cantautores folkies viendo videos en Youtube, algo bastante raro para los niños de su edad, pero lo que le daría el toque distintivo. A los 15 años comenzo a tocar en bares para algunos parroquianos casi siempre borrachos que aplaudían al niño, pequeño aprendiz de Dylan. Dos años más tarde Jake audicionó para participar en el festival Glastonbudget, una versión económica del Festival de Glastonbury. No fue su día de fuerte y la historia contará que ese día fue rechazado. Al día siguiente recibió una llamada de BBC Radio 1 en la que le invitaron a participar en el Introducing Stage del Festival de Glastonbury, en junio de 2011. Unos meses después firmó con la discográfica Mercury Records y empezó a grabar los primeros singles, que se irían dando a conocer a partir de marzo de 2012: Trouble Town, Country Song, Lighting Bolt, Taste It y Two Fingers. Country Song, además, se usaría en el anuncio televisivo de la cerveza Greene King IPA.
A partir de allí el camino todo se vuelve vertiginoso. Festivales, nominaciones a premios como los Brit Awards y teloneo de grandes del brit rock como Noel Gallagher. A primera vista pareciera que Bugg se ha comido todo lo que ha podido de Bob Dylan, pero lo cierto es que uno de sus referentes directos e influencias es el cantante, poeta y compositor escocés Donovan -que es a Dylan, lo que Cristiano Ronaldo a Messi-. También es un gran escucha de bandas como Oasis y sus congéneres Arctic Monkeys y Kate Nash. La aparición de Bugg es un Oasis en un palido escenario musical britanico dominado por bandas y artistas impulsados por la combustión hormonal adolescente.
Bugg ya ha editado su primer disco -llamado simplemente Jake Bugg- con muy buena recepción de la prensa mundial, y terminó este mes su primer Tour Europeo.