Llega a Córdoba Mauricio y su Ciudad Emergente.
La semana que viene se llevará a Córdoba el festival Ciudad Emergente, evento que lleva ya 7 años de realización y que se ha transformado con el paso del tiempo en uno de los guiños rockeros-juveniles de la gestión PRO de Mauricio Macri en la Ciudad de Buenos Aires. La grilla es muy interesante, artísticamente hablando y sin dudas la gratuidad del evento que tendrá como epicentro en la Plaza de La Música (aunque también hay eventos en la Casa de Buenos Aires), convocará a un gran número de personas.
En principio hay que decir que los músicos deben tocar en cada lugar que se les abra la puerta. El laburo es laburo y que hoy paguen por tocar es una buena noticia. Si es cierto que no todo escenario es igual. No es lo mismo el escenario del 24 de marzo que este escenario, y lo que se haga arriba de él será lo que verdaderamente importe. Porque cuando todo se colorea de amarillo, deja de ser un terreno neutral. Porque cuando los afiches están en las calles al lado de los de Mauricio con la leyenda “Estoy con vos”, el desembarco del festival deja de ser ingenuo.
El festival, esta bien. Aunque Córdoba debería tener la autonomía de poder reconocer de forma propia a sus bandas y artistas y no depender de la mirada porteña “del asunto. El festival es un guiño de la gestión macrista para sumar a todos aquellos que espanta con el nombramiento de Violetta como embajada cultural porteña o del reconocimiento a la trayectoria de Arjona. Es una política aislada en el marco de un rumbo politico-cultural que apunta hacia otros lados, muy lejos de ser una política de Estado. Y eso esta bueno marcarlo. La ley de la música atada a la ley de medios, el MICA e Igualdad Cultural son políticas de Estado, y el Ciudad Emergente esta lejos de ser eso, y en el contexto político macrista es solo un chivo expiatorio. Recordemos que Macri fue quien designo como ministro de educación de la Ciudad de Buenos Aires a Abel Posse, quien alla por 2009 dijo que el rock era una cuna de drogadicción. En ese momento el ministro de educación de la gestión Macri decía que: «Son formas enfermas. Yo creo que el rock creó una alienación juvenil muy grande, que no es precisamente estética, y proviene de la situación desolada de los jóvenes que tienen que encontrar en esa exaltación, donde usted no puede negar que existe la droga porque si no sería un ingenuo que no conoce el mundo». Y 5 años después Macri se lava la cara con el rock.
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