Sofía Naara: la letra como refugio, la fantasía como coherencia

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Sofía Naara nació en Buenos Aires y desde hace años viene construyendo una obra que se mueve entre la música, la docencia, la escritura y la dirección artística. Cantante, baterista, compositora y docente, su universo creativo se caracteriza por una sensibilidad aguda, una ética del detalle y una búsqueda constante de transformación. Su primer disco solista, Las Torpezas (2022), es una obra conceptual que narra un proceso de sanación y autoconocimiento, donde cada canción funciona como una estación emocional, una pregunta, una certeza o una despedida.
Además de su trabajo como solista, Sofía forma parte del power-trío Mugre, y colabora activamente con el Archivo de la Memoria Trans, entre otros espacios de militancia y creación. Su último single, Vértigo, adelanta el pulso íntimo y experimental de su próximo disco, previsto para 2026. En paralelo, se encuentra explorando la escritura como nuevo territorio creativo, presentándose a convocatorias y saliendo —como ella misma dice— del clóset de la escritura.

En esta entrevista, Sofía reflexiona sobre el cruce entre su rol docente y su práctica artística, la ética que moviliza su obra, el poder de los silencios, el deseo, la fragilidad, y la fidelidad a la fantasía en un mundo que exige coherencia. Con una mirada lúcida y poética, nos invita a pensar el arte como refugio, resistencia y posibilidad de encuentro.

O.c: Antes que nada, me gustaría que nos cuentes quien es Sofía Naara…
Sofia: Soy Sofía y Naara es mi segundo nombre. Nací en abril de 1994 en Buenos Aires. Soy música y también escritora, aunque esto último lo hago de manera mucho más privada, al menos por el momento.

O.c: También sos docente. ¿Cómo se articula tu rol como docente con tu práctica artística, y qué se enseña y qué se aprende en ese cruce?

Me apoyo mucho en la práctica artística para dar clase. Cuando empecé a estudiar música, fue para responder a las obras en concreto; ya había empezado a tocar en vivo y ser parte de proyectos propios y ajenos, y quería seguir creando desde una práctica cada vez más sólida. Como docente, me respaldo en mis propios espacios de formación y busco transmitir las herramientas a través de los métodos que a mí me fueron (y me son) trascendentes y efectivos a la hora de estudiar y fijar conocimientos. No me gusta que nada de lo que explico quede en el aire, siempre busco que aterrice y sea comprendido con el propio lenguaje de cada alumnx. Eso es lo que aprendo constantemente: a observar con qué tipo de ejercicios y modos de enseñanza responde mejor el entendimiento de la persona que estudia conmigo. Es muy bello ver crecer.

O.c: En las canciones La Duda y La Certeza hay una tensión entre afirmación y pregunta. ¿de dónde surge esa necesidad, esa idea?

Sofi: Al momento de componer Las Torpezas (2022) entendí que, mientras que La Duda cantaba más que nada sobre las primeras sospechas de estar perdidx en las necesidades de alguien más, en La Certeza ya no había sospecha, sino seguridad: “me perdí en las necesidades de alguien más y estas son las consecuencias”. Por eso la nombré de esa manera. Sin embargo, en el disco, es La Duda la que responde y viene a poner la conclusión sobre la mesa: tiempo es amor, y es propio —algo que L. me decía mucho, que a su vez alguien le había dicho a ella—. La Duda es la madre de La Certeza. Descubro ahora que también me gusta verlo de esa forma.

O.c: La canción que da nombre al disco Hay una sensualidad que se expresa en gestos mínimos: abrocharse al tapado, compartir movimientos. ¿Cómo se escribe el deseo sin caer en la fórmula típica?

No me había puesto a pensar en esto. Para responderte me observo, atiendo a los versos de Las Torpezas y puedo deducir que lo que hago o hice es poner en palabras los detalles específicos que me generaban deseo; poner al lenguaje al servicio de expresar algo único y que, en este caso —y en casi todos mis casos—, pertenece a experiencias de la vida real. La mirada en el detalle de lo observado —o imaginado—, y un lenguaje que se anime a explorar la descripción: creo que esa combinación puede traer versos tan orgánicos como atípicos.

O.c: Me quedó resonando la canción Brutalidad, donde decís “En mi silencio vive tu brutalidad”. ¿Qué tipo de violencia se guarda en el silencio, y cómo se escribe lo que no se puede nombrar? Después decís “Este es tu reino y nadie puede destronar tu realidad”. Hay algo de poder ahí: si es mi reino, mando yo y esta es mi realidad. ¿Cómo se negocia el poder en los vínculos, y qué implica reconocer el territorio del otro? En Derrames cantás: “En el muro queda lo que no se sabe hablar”. ¿Qué tipo de silencios te interesa visibilizar, y cómo se escribe lo que no tiene lenguaje?

Brutalidad habla sobre un vínculo en el que está todo mal. El silencio no guarda violencia, en este caso, sino terror. Ese terror es la estructura sobre la que se construye lo violento y ajeno.

Lo que no se puede nombrar, si me baso en mis obras hasta el momento, se escribe en Alemán.

El poder al que refiere Brutalidad es por completo indeseable y, por lo tanto, no tiene lugar a negociaciones: no debería existir, y ya. Reconocer el territorio de un otrx implica respeto, quizá antes que nada. De todos modos, “el reino” en esta canción-escenario y para una de las dos personas dentro de él —quien canta—, es un lugar de permanencia involuntaria y dentro del que no tiene ni voz ni voto.

O.c: En poeta cantas “Vengo de una guerra lenta, maté a mis personas” — ¿Qué tipo de guerra se narra en esta canción? ¿Crees que se puede matar a uno mismo para que renazca otro yo de alguna manera o somos siempre el mismo?

Sofia: La “gu3rra lenta” a la que refiere la canción es de carácter metáforico, en primer lugar, y en segundo lugar, diría que quien canta se refiere a una lucha que logró ganar y que fue contra sus propios miedos, ya viejos. No creo en destruir partes de lo que somos sino en tomar de ellas lo que nos puedan enseñar, para después transformarlas y reubicarlas. En cuanto a las maneras de hacerlo, pienso y observo que las hay de todo tipo y colores, y en tiempos muy personales y disímiles.

O.c: “Si me encuentras, límpiame, vísteme”. Es una forma de pedir ayuda, de entender que hay otro. ¿Qué tan importante es en el mundo donde vivimos hoy de las redes sociales, donde cada vez estamos más conectados, pero al mismo tiempo algunos sostienen que menos conectado con lo esencial con lo que te brinda el cara a cara saber pedir ayuda y conocer al otro?

Sofi: Pienso que reconocer al otrx y aprender a pedir ayuda es mucho muy importante, en este y, creo, en cualquier mundo. En cuanto a las redes sociales, lo único que me gusta mucho de ellas es la posibilidad de encuentro y construcción con lxs demás. Manejarlas con salud se volvió un desafío que hoy en día recae en nosotrxs. Es difícil porque es un universo lleno de trampas y motivaciones bastante aberrantes.

O.c: “Mi refugio fue la tolerancia” ¿Qué lugar ocupa la tolerancia en tu poética? ¿Es refugio, resistencia, estrategia? ¿crees que vivimos tiempos de poca tolerancia como sociedad?

Sofi: La tolerancia fue el rasgo que me permitió experimentar ciertas oscuridades (peligros, bordes, angustias fuertes) y que, en tal caso, contribuyó a mi obra (pista de aterrizaje de todo lo que necesité elaborar posteriormente). Diría que simplemente es una cualidad.

Con respecto a los tiempos en que vivimos: sí, y nada tiene que ver con lo que creo o no creo, la poca tolerancia está más que a la vista. De hecho, respondo esta pregunta en 2025, año que empezó con Orlando Lutz Fogar incendiando la casa de una familia de la comunidad LGBTIQ+, después de hostigarla durante años a causa de su identidad disidente. Y —desearía mucho no decir— entre tantos otros crímenes de odio y lesa humanidad que se dieron y se dan de manera constante a lo largo de todo el mundo.

O.c: No hace mucho sacaste Vértigo, tu ultimo single en la que vos decís que estuvo compuesta por dos fórmulas distintas y alternadas, que pensabas en escribirlas a dos personas. Me gustaría que nos contaras un poco más sobre cómo fue ese proceso.

Sofi: Es una canción que tiene un compás de 4 tiempos, seguido de uno de 3 tiempos, y así, se van alternando. Era una tarea del método de audioperceptiva que estaba terminando de cursar (Método para leer y escribir música a partir de la percepción, de María del Carmen Aguilar). Hacía unas semanas, me había enamorado un poco de alguien que no tomaba café porque le daba ansiedad (same). Y supe de ella alguna que otra cosa más que también usé para terminar de escribir la canción-ejercicio.

Después, o mientras, me di cuenta de que tenía una amiga a la que tranquilamente podría estar dedicándole las mismas o varias de esas palabras. Como mi amiga es música, se la pasé primero a ella. Le gustó, me hizo feliz que le gustara. De hecho, es la misma persona que me motivó este año para lanzarla antes que al resto del disco (que vendrá en agosto de 2026).

O.c: Es una canción también muy íntima diría de hecho decís “Lo difícil no es irse, es quedarse sin el miedo” ¿Qué implica sostener el vínculo desde la fragilidad?

Sofi: Me quedo con la parte del sostén para decir que —y lo digo por mil golpes que me di al encarnar esta forma— sostener no es un camino amoroso para mantener un vínculo.

O.c: “Gracias a la persona que dijo que no” ¿Un no o un rechazo puede agradecerse al final?

Sofi: Es “gracias a la persona que dijo que ‘no, lo difícil no es irse, es quedarse’”. Y esa persona que (me) dijo eso es mi psicólogo, y a él es el agradecimiento. Pero me gusta tu lectura: en ese caso, esta pregunta te la haría yo a vos.

O.c: “Ser fiel a la fantasía” — ¿cómo se negocia esa fidelidad en un mundo que exige coherencia? ¿Qué tipo de fantasía te interesa cuidar?

Sofi: Creo que la fidelidad a la fantasía, al menos a la fantasía a la que me refiero en la canción, es completamente compatible con la coherencia. Hablo de la fantasía que abre paso al entusiasmo.

O.c. Sabemos que de algún modo te encontrás despidiendo Las Torpezas, y que Vértigo funciona como un comienzo —o quizás no— de un próximo trabajo. Además estás involucrada en distintos proyectos como Mugre y el Archivo de la Memoria Trans. ¿Cómo sigue el año para Sofía Naara? ¿Cuáles son los próximos movimientos, deseos, búsquedas?

Sofi: Estoy en proceso creativo de mi próximo disco, al que ya le puse fecha de lanzamiento para la segunda mitad del año que viene, cosa que me ayuda mucho a mantenerme concentrada en sus avances, porque soy muy dispersa. (Aunque no reniego de serlo, porque es una forma que me permite, justamente, poder habitar más de un proyecto al mismo tiempo). Gracias a las personas que ponemos el cuerpo y al amor de quienes los rodean, todos los proyectos en los que creo y participo están en un muy bello cauce hacia sus distintos deseos y objetivos. También empecé a escribir para salir del clóset de la escritura; me estoy presentando a algunas convocatorias, a medida que voy pudiendo. Me deseen suerte.