Octubre: el futuro, en cinco discos

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El mes que cierra ha sido testigo de algunos de los lanzamientos más importantes del año. Como mes a mes, te rescatamos cinco para que vayas anotando de cara al balance de diciembre. 

Discutible – Babasónicos
Este es uno de los discos más importantes del año, pocas dudas quedan de eso aunque suene demasiado determinante. ¿Por qué? Principalmente porque resulta extraño encontrar en el establishment musical argento (caracterizado siempre por una comodidad superlativa) artistas que decidan seguir aportando al sisma como modus operandi. Pero además, también hay que decirlo, Babasónicos parecía haberse olvidado de ese espíritu rebelde en sus últimos trabajos. Entonces hay que celebrar. «Discutible» tiene el nombre perfecto para identificar un movimiento astuto. Babasónicos se reafirma como uno de los grupos más libres del siglo en nuestro país y retoma algunos elementos pop psicodélicos de sus primeros años para ponerlos a disposición de los mensajes que son necesarios gritar en el presente. Y lo hace con maestría, reviviendo siempre en la piel de un canción.

Prender un fuego – Marilina Bertoldi
Con su tercer disco, Marilina Bertoldi se convierte definitivamente en la voz femenina más importante de la escena actual del rock argentino. Al escriba le parece que ella no se sentirá cómoda con tal afirmación y piensa, profundamente, que eso es una buena noticia. El riesgo de acomodarse en los laureles cosechados con su «Sexo con modelos» del 2016 era una posibilidad muy concreta que la artista nacida en Sunchales (Santa Fe) decidió dejar a un costado para saltar hacia adelante. En el camino quedaron las guitarras que todo lo demolían para abrir el juego a un impulso funk con el que ya se había abrazado en sus tiempos con su banda Conor Questa. Hay enormes canciones («Correte», «Fumar de día») momentos más explosivos desde el plano de la psicodelia roquera («O no?) y pasajes más intimistas («Remis», «Prender un fuego») que incluso juegan con los códigos de un núcleo lo suficientemente pequeño como para crear una especie de enigma entre seguidores y escuchas curiosos («Tito volvé»). Si hay discos que sirven para consolidar caminos promisorios, este es uno de ellos. 

SMS – Salvapantallas
El primer disco de Santiago Celli y Zoe Gotusso representa un salto evolutivo para el dúo que se ganó un lugar en la escena nacional a partir de versiones de temas clásicos que se empezaron a viralizar en YouTube para luego dar paso a las composiciones propias que confirmaron la sospecha de muchos: además de grandes interpretes, estábamos frente a grandes creadores. En «SMS» hay un cúmulo de códigos de época que explican gran parte del secreto mejor gritado por Gotusso y Celli, ese que los convierte en genuinos representantes de una generación. En el disco, el diálogo de guitarras deja lugar a un pulso más bailable que se empuja desde los teclados y las programaciones más identificadas con el universo del electropop. Si se analiza el proceso, algo de ese movimiento ya podía observarse en los últimos singles de la banda. La profundización en ese perfil puede explicarse desde una decisión estética que también encuentra una razón determinante en la elección del productor del disco: Juan Ingaramo. La perla del disco está en la voz de Jorge Drexler sumándose a «Me conecto», la que parece ser la canción central del disco. El «padre de la criatura» (el dúo toma su nombre de la canción que el uruguayo grabó en su disco «Eco») también encuentra allí la posibilidad de avanzar y dejar atrás el concepto clásico de la telefonía de la mano de dos artistas que le abren el camino para sumergirse en el universo de la generación 4.0.

Enchastre – Louta
Nada de todo lo que se dijo hasta aquí sobre Louta podrá ser sostenido con demasiada facilidad. Salvo la premisa de que estamos ante un artista integral cuyos horizontes no parecen encontrar límites. Después de asentarse a partir de un repertorio al servicio del show performático que dejó boquiabiertos a quienes hayan tenido la oportunidad de presenciarlo, Jaime James (ese es su nombre) estalla con un disco de canciones que además de empujarte a la pista, dicen un montón de cosas. Louta dibuja un mapa multirítmico en el que conviven canciones de amor descontracturado, libertades expuestas y relatos de época que se mixturan con juegos líricos en los que no faltan un toque de humor y extravagancia. «¿Quién no nos va a escuchar cuando nos miren despiertos, cuando ese grito de verdad cambie el destino del tiempo?» ruge Marilina Bertoldi en «Uacho», la canción en la que Louta parece pararse de manos ante el mundo. A partir de «Enchastre», varios deberían bajar la cabeza.

Best Seller – Juan Ingaramo
Después de haber ido preparando el terreno para su última transformación a través de tres adelantos que dejaron asomar las características centrales de su nuevo sonido, el cordobés se abraza definitivamente a la música urbana a través de un trabajo tan contundente como provocador. Sincero y arriesgado, las dos primeras frases del nuevo repertorio de Ingaramo son dos preguntas: «¿Dónde estará mi suerte si esto ya no me divierte? ¿Qué cantarán mis versos cuando no esté de acuerdo?«. Desde esa aparente incomodidad empieza a construir el entramado de su nueva propuesta que se robustece con la participación de Dakillah, Ca7riel, Louta y Neo Pistea. En el track list aparece su versión de «Fuego y pasión» (junto a Elsa y Elmar) que se aprovechó la oleada del revival Rodrigo y ya se convirtió en su tema con más reproducciones en Spotify.