Mariano Esain llega a Córdoba de la mano de Juan Marcelo Lucero en el marco de una nueva edición del Ciclo Músico Anfitrión.
Desde Martes Menta a Valle de Muñeca, pasando por Menos Que Cero, el trío Flopa Manza Minimal y su participación determinante en muchos de los discos que han marcado la escena nacional emergente de los último años, Mariano Esaín va alcanzado el status de imprescindible. Cantante, guitarrista, productor, músico con mayúsculas, siempre con el oído atento y el la fuerza de trabajo puestas a dispocisión, Manza ha dicho presente en más de un centenar de discos en los últimos diez años. Alguno de ellos, de firma cordobesa.
En medio de los trabajos que lo tienen como protagonista y con un nuevo disco de Valle de Muñecas en gateras, Manza desembarcará en Córdoba el próximo jueves 31 de Agosto. Su guitarra y sus canciones se apoyarán en el anfitrión Juan Manuel Lucero durante una nueva edición del Ciclo Músico Anfitrión.
Otra Canción: Llegas a Córdoba invitado por Juan Marcelo Lucero ¿Cómo surgió la invitación? ¿Con qué nos vamos a encontrar el jueves?
Manza: Con Juan nos conocimos hace unos años. Tocamos juntos en Río Cuarto, y está buenísimo que me haya invitado a compartir este ciclo. Voy a tocar temas de todas mis bandas, pasadas y actuales, y también seguramente algunas versiones de otros artistas. El va a hacer su show y probablemente hagamos algo juntos. Ese es el espíritu del ciclo.
O.C: En varias ocasiones hemos hablado sobre tu relación con Córdoba, o al menos con algunos actores de la escena local. Además, sos un tipo que está al tanto de lo que sucede…¿Tenes una lectura sobre el presente cordobés?
M: Como alguien que no vive en Córdoba, mi visión es muy sesgada. Está marcada por lo que he visto las veces que vine a tocar, que por otro lado no son tantas como me gustaría, o por las cosas que me recomiendan las bandas con las que he compartido escenario. El libro «Esto es una escena» me parece muy bueno como acercamiento. Me intereso por lo que pasa en todos lados, pero es inevitable que se me escapen muchas cosas.
O.C: “El final de las primaveras”, el último disco de Valle de Muñecas, apareció en el 2015. Entiendo que ha de haber nuevo material, desde lo compositivo al menos. ¿Hay nuevos disco en el horizonte cercano?
M: Hay muchos planes y estamos empezando a pensar en el próximo disco. Mientras tanto, está por salir un EP de cuatro canciones, Valle de Muñecas haciendo punk rock, que es la música que nos formó en nuestra adolescencia. También estamos por editar un single en vinilo 7″. Todo esto es para la primavera.
O.C: ¿Por donde andan esas canciones?
M: Valle de Muñecas tiene un montón de influencias, y esa mezcla nos da la identidad. Tal vez lo que va variando de disco a disco es el concepto de producción y arreglos, y no tanto la composición. Pero siempre hay cosas nuevas, y no tanto, que uno escucha. Beach Fossils, Alvvays, DIIV, Spoon, Raveonettes, Wedding Present, Luna, son cosas que andan dando vueltas últimamente en nuestras orejas.
O.C: El año pasado su música se utilizó para una publicidad de La Campagnola. Lo traigo porque me gustaría preguntarte por las consecuencias de esos eventos. ¿Sirve? ¿No sirve? ¿Es una manera de llegar a nuevos auditorios o sólo un laburo que aparece, ahí, en el medio de la vida de la banda? ¿Se preguntan por esas cosas?
M: Cuando surgió la posibilidad, obviamente nos hicimos montones de preguntas. Un año después, hay mucha gente que llegó a otras cosas de la banda (incluso en otros países) a partir de eso, así que fue positivo. Y es obvio que no nos hicimos masivos.
O.C: Te pregunto por tus últimos trabajos produciendo, grabando, mezclando, aportando al sonido final de los discos de algunas de las bandas que están dándole un color distinto a la escena actual. O, al menos, lo están refrescando un poco. «Asfalto», de Indios por ejemplo, que me parece uno de los discos más logrados de este 2017. ¿Cómo fue el laburo con ese disco?
M: Yo trabajé solamente en cuatro canciones de ese disco. Cada disco nuevo en el que trabajo me genera nuevas ideas, me lleva a probar otras cosas, y a conocer como cada banda tiene distintas maneras de abordar la música. Siempre es enriquecedor.
O.C: ¿Qué estás trabajando en la actualidad desde ese lugar?
M: Acabo de terminar un disco nuevo de Acorazado Potemkin, grabé cuatro canciones de lo nuevo de Turf, un nuevo disco de Marco Sanguinetti, las voces de lo nuevo de Coiffeur, y más cosas que andan dando vueltas
O.C: Hace cerca de dos décadas que ese trabajo te tiene con una ocupación casi plena. ¿Cómo ves que ha avanzado la escena nacional en ese tiempo? ¿Qué adelantos técnicos y tecnológicos ven que han servido para esos desarrollos?
M: Me gusta el punto al que llegó la escena a la cual pertenezco. Lo digo porque sé que hay muchas otras escenas con las cuales no tengo tanto contacto. Me gusta el creciente interés por la estética de los discos. Los nuevos medios y la democratización de la tecnología de grabación generó vaivenes en calidad técnica de las grabaciones, pero a medida que los músicos aprenden más y más a manejar las herramientas empiezan a aparecer sonidos e ideas que a veces no podrían ocurrírsele a alguien con un background técnico
O.C: ¿Hay proyectos para tu faceta solista?
M: Me gustaría hacer algo, porque tengo muchas ideas que creo que no son para Valle de Muñecas, pero no soy tan prolífico como compositor, entonces todo lo que escribo es para la banda. Y está bien así.