La histórica roquería cordobesa festeja sus 25 años con un compilado que reúne algunos de los artistas más representativos del género en nuestra ciudad.
Como en todos los procesos culturales y sociales, hay sitios que guardan en su memoria la suerte de haber sido puntos paradigmáticos de encuentros, procesos, desarrollos y crecimientos. Así, cuando uno habla de rock en la ciudad de Córdoba, difícilmente pueda dejar de recordar, nombrar o señalar a Lado B. Esa tienda en la que, muchos de nosotros, nos encontramos con nuestros discos, nuestra música y fuimos también formando nuestros perfiles estéticos, física y espiritualmente.
Lado B cumple 25 años y la decisión en torno al formato del festejo parece acertada y saludable. En un momento en que la música de Córdoba parece estar pasando por el momento más interesante de su historia, la roquería decide reunir a 18 de las bandas más importantes de la escena de los últimos años para dar lugar al nacimiento de un compilado (nosotros, ellos y todos deseamos que sea tan sólo «el primero») que sirve para mostrar la altura en la cual, hoy, se para a discutir el rock cordobés en la escena nacional.
El compilado se propones como misión «Reflejar la música que se produce actualmente en la región y ampliar sus circuitos de difusión. En estas convergencias, los músicos, al igual que sus públicos; serán el centro del escenario. Además, queremos generar relaciones de intercambio, donde medios de comunicación, músicos y oyentes se reúnan como iguales.» Así se explica desde el sitio oficial del trabajo.
Los Frenéticos, Paris Paris Musique, De la Rivera, Los Monkys, Bosques de Groenlandia, Rayos Laser, un día perfecto para el pez banana, The Chicken Faces, Lautremont, Smoke Sellers, Hipnótica, Tomates Asesinos, Cyro & la Liga Premier, Los Cocaleros, The Tristes, Eruca Sativa, Viaje a un minúsculo planeta y Odoghan son las bandas elegidas para este «Volumen 1 – Córdoba Tiene Rock» que viene acompañado de un book con fotos e historia de cada una de las bandas (a cargo de Carlos Sederino) y editorializado por Dirty Ortiz. Todo eso, acompañado por el arte y el diseño de Santiago Guerrero.
La invitación está hecha entonces. Sólo resta seguir. Escuchando, trabajando y fluyendo con la música.